miércoles, 8 de septiembre de 2010

Immanuel Kant


Immanuel Kant nació en Königsberg, Prusia Oriental en 1724. Asistió al Collegium Fridiricianum a la edad de ocho. Luego de ocho años de estar en esa escuela, siguió estudiando en la Universidad de Königsberg, en donde se especializó principalmente en filosofía, matemáticas y física. El infarto de su padre y su posterior muerte en 1746 interrumpió sus estudios. Pero los retomó gracias a un amigo en 1755, recibiendo su doctorado en 1756.

Enseñó en la universidad por 15 años, comenzando con clases de ciencias y matemáticas, aunque con el tiempo se fue por la mayoría de las ramas de la filosofía. A pesar de su creciente reputación como un pensador original, incluso después de fracasar dos veces en el intento de obtener una cátedra y de haber rechazado ofrecimientos de otras universidades, por último fue nombrado profesor ordinario de lógica y metafísica.

En el pensamiento de Kant suele distinguirse un período inicial, denominado precrítico, caracterizado por su adhesión a la metafísica racionalista de Wolff y su interés por la física de Newton. En 1770, tras la obtención de la cátedra, durante diez años de silencio acometió la tarea de construir su nueva filosofía crítica, después del contacto con el empirismo escéptico de Hume.

Continuó escribiendo y dando clases en Königsberg los siguientes 27 años, en donde hay gran cantidad de estudiantes debido a su acercamiento racionalista, y por tanto, el enfoque poco ortodoxo de los textos religiosos. Esto llevó a la presión política del gobierno de Prusia, y en 1792, se le prohibió impartir clases o escribir sobre temas religiosos por el rey, Fredrich Guillermo II. Kant obedeció sumisamente la orden hasta la muerte del rey cinco años después, volviendo a la escritura y la docencia de sus ideas. Al año siguiente de su retiro, publicó un resumen de sus puntos de vista sobre la religión. Murió en 1804.

miércoles, 11 de agosto de 2010


Estas imágenes dan a evidenciar las atrocidades ocurridas en la época. El tiempo de los que eran alimentados por los súbditos, era malgastado en desarrollar obras de ingeniería de un corte un tanto desviado, las cuales pueden ser apreciadas a simple vista.